El 31 de diciembre de 2019, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se enteró de varios casos de neumonía grave en la ciudad china de Wuhan. Desde entonces, la neumonía, una cepa del coronavirus que la OMS denominó COVID-19, se ha extendido por China y otros países.
A medida que los líderes mundiales y los funcionarios del ámbito de la salud rastrean la tensión y toman decisiones con respecto a la contención, los directores de cadena de suministro deben evaluar y planificar cómo afectará el virus a las cadenas de suministro internacionales.