Aprovecha la colaboración con la alta dirección para afrontar los desafíos arancelarios y preservar la estabilidad.
Aprovecha la colaboración con la alta dirección para afrontar los desafíos arancelarios y preservar la estabilidad.
Por Thomas O’Connor | 1 de abril de 2025
Los cambios en los aranceles afectan el abastecimiento, la fijación de precios, la demanda de los clientes y las previsiones financieras. Sin una adecuada coordinación entre la alta dirección, las empresas corren el riesgo de tomar decisiones fragmentadas, lo que puede aumentar los costes, reducir la agilidad y erosionar los márgenes.
Cuando los directores de cadena de suministro (CSCO), los CFO y los CEO trabajan alineados en las estrategias frente a los aranceles y su respuesta, las organizaciones logran equilibrar con mayor facilidad los costes, el riesgo y la resiliencia. Esto facilita una toma de decisiones más rápida, una mejor planificación de escenarios hipotéticos y un entendimiento compartido de las contrapartidas, transformando así la volatilidad arancelaria en una ventaja estratégica.
Según la encuesta de Gartner sobre volatilidad arancelaria de 2025, el 74 % de los CSCO considera que los nuevos aranceles de EE. UU. son un catalizador para cambios significativos en la estrategia. Mediante una estrecha colaboración y comunicación con la dirección ejecutiva, los CSCO pueden coordinar respuestas que fortalezcan la resiliencia y la ventaja competitiva.
Cerca de dos tercios de los directores de cadena de suministro consideran estar alineados con su junta directiva y la alta dirección en las prioridades relacionadas con el riesgo. Esta colaboración es fundamental para reducir los valores de importación y realizar cambios estratégicos en la red.
Utiliza técnicas de “storytelling” para comunicar información basada en datos de manera efectiva y clara al resto de la alta dirección e impulsa una toma de decisiones informada.
El 79 % de los CSCO se sienten preparados para afrontar el nuevo entorno comercial, gracias a una década de adaptación a los cambios en el comercio global. Para mantener la estabilidad de las operaciones ante la llegada de los cambios arancelarios:
Llega a un consenso con la dirección ejecutiva con respecto a las estrategias de costes.
Negocia con los proveedores.
Aprovecha las fluctuaciones de la moneda para compensar los efectos financieros.
No confundas las medidas a corto plazo con las estrategias a largo plazo, ya que la máxima incertidumbre está por llegar. Es fundamental mantener la flexibilidad y estar preparado para ajustar los planes.
Equilibra las necesidades a corto plazo con estrategias sostenibles a largo plazo. Antes de actuar:
Identifica el grado de exposición. Evalúa la vulnerabilidad de la red frente a los nuevos aranceles y los cambios en el comercio.
Cuantifica el posible impacto. Analiza el efecto sobre los costes y los niveles de servicio.
Define la respuesta. Determina si es necesario realizar cambios en la red y cuándo hacerlo.
Evita magnificar el impacto de los aranceles ante la junta directiva al evaluar la idoneidad de la red y las ubicaciones de abastecimiento, ya que los cambios en la red son movimientos a medio o largo plazo. El 54 % de los CSCO afirman que se requieren más de 12 meses para transferir el 25 % del suministro a fuentes regionales. Prioriza las medidas que estén alineadas con los objetivos generales de la organización y que refuercen su resiliencia.
A medida que los CFO y CEO recurren cada vez más a los CSCO en busca de orientación para afrontar la volatilidad arancelaria, asegúrate de lo siguiente:
Presenta información basada en datos y planes de acción claros para facilitar una toma de decisiones informada.
Define los riesgos y oportunidades potenciales, así como el cronograma previsto para implementar los cambios estratégicos.
Mantén una comunicación sólida para asegurar que todas las partes interesadas estén alineadas y trabajen hacia objetivos comunes.
Cuando se trata de la estrategia arancelaria, los CSCO deben mantener una comunicación constante con la alta dirección para asegurar la alineación con los objetivos estratégicos y los niveles de tolerancia al riesgo. Esto implica establecer prioridades claras y utilizar la información basada en datos para fundamentar las decisiones. Al mantener la transparencia y fomentar la colaboración, los CSCO pueden garantizar que sus estrategias estén alineadas con los objetivos de la organización y que haya claridad sobre qué iniciativas seguirán recibiendo financiación.
Los CSCO son responsables de estabilizar las operaciones y minimizar las interrupciones causadas por los aranceles. Deben negociar con los proveedores, aprovechar las fluctuaciones monetarias y alinearse con la dirección ejecutiva en las estrategias de costes. Su enfoque proactivo ayuda a las organizaciones a afrontar la incertidumbre y mantener una ventaja competitiva.